viernes, 8 de mayo de 2015

La Vanguardia y la charlatanería

Veintinueve de abril. Ocho menos cuarto de la mañana. Cojo el tren camino al laboratorio de Químicafísica de la UB. Leyendo tranquilamente el diario La Vanguardia, hasta que llego a la contraportada: "Un edificio no debe superar la altura de los árboles de la zona". Curioso, pensé. Supuse que sería por razones de seguridad y que un arquitecto lo denuncia, así pues, me propuse leerlo.
Mas la sorpresa no fue de de mi agrado: Charlatanería, pseudoecologistas, ondas wifis cancerígenas, ludismo, etc. Lo que siempre pasa cuando alguien que no sabe del tema abre la boca.

La Vanguardia entrevista a Ángel Martínez, de 62 años, arquitecto urbanista especialista en bioconstrucción (ríame yo). Según la entrevista, Ángel Martínez, cree en la filosofía de construir de manera respetuosa con el medio ambiente y con la salud de las personas bebiendo de nuestro pasado y apostando por las antiguas tecnologías. Menciona por ejemplo, las construcciones que tenían nuestros abuelos, como casas de campo.

No entraré en el terrero de la masificación humana del suelo porque, al parecer, él lo pasa por alto. Iré directo donde más me pica:

¿Por dónde debemos comezar?
-El terreno debe estar libre de contaminaciones subterráneas, como corrientes de agua, fallas geológicas, vacíos, masas férricas o metálicas [...]

Construir sobre masas férricas o metálicas... Cuando leí eso comencé a fruncir el ceño. Al parecer, el señor Marinez afirma que los campos magnéticos pueden influir en la salud humana, la cual cosa es falsa. Es un alarmista más entre toda la parafernalia pseudoecológica que en su vida a tocado la ley de Lorentz o ni si quiera sabe calcular la fuerza de un campo magnético. Cuando leí esto ya calé de qué madera estaba hecho el señor Martinez, y me vino a la cabeza el típico caso en el que afirma que las ondas wifi producen cáncer, o malestar. Y así es. Más abajo, en la entrevista, cita:

También es necesario fijarse en lo que hay alrededor.
-Sí, antenas, cables de alta tensión, transformadores, [...] Se deben hacer redes en forma de árboles y evitar los circuitos cerrados. Y durante la noche desconectar el wifi.

Bingo. Mis sospechas no eran falsas. Este personagillo pertenece al New Age moderno que azota a golpe de irraconalidad y desconocimiento nuestra sociedad.
Las ondas wifi, como poca gente, por desgracia, sabe, son totalmente inocuas para la salud humana, así como los campos electromagnéticos que puedan generar las infraestructuras como cables de alta tensión.

Conclusiones de las investigaciones científicas
En los últimos 30 años, se han publicado aproximadamente 25.000 artículos sobre los efectos biológicos y aplicaciones médicas de la radiación no ionizante. A pesar de que algunas personas piensan que se necesitan más investigaciones, los conocimientos científicos en este campo son ahora más amplios que los correspondientes a la mayoría de los productos químicos. Basándose en una revisión profunda de las publicaciones científicas, la OMS concluyó que los resultados existentes no confirman que la exposición a campos electromagnéticos de baja intensidad produzca ninguna consecuencia para la salud. Sin embargo, los conocimientos sobre los efectos biológicos presentan algunas lagunas que requieren más investigaciones.

Fuente: http://www.who.int/peh-emf/about/WhatisEMF/es/index1.html



Sigamos con la entrevista.

[...] Somos naturaleza, se trata de no perder el contacto con ella, pero nos separamos mediante hormigón, asfalto, plastifico, aislantes, que no permiten el paso de energía.

¡Y no podía faltar el ingrediente mágico magufo! ¡La energía! Esa energía misteriosa y universal. La energía hippie, como le llamo yo, que nadie sabe qué es pero todos (los magufos) la sienten, y no hay manera de detectarla en el laboratorio. Poco a poco, mis prejuicios sobre este hombre empiezan a formar una imagen, una imagen típica y ya aburrida para mi. La del magufo medio. Aquí podemos ver más perlas:

Hay un principio de la bioconstrucción que es esencial: estar cuanto más cerca mejor de la energía de la tierra. Por eso nos revitaliza ir descalzo en un parque o una playa y nos cansa tanto andar sobre hormigón

En fin, nada más que decir. Olé La Vanguardia por publicar y permitir que la gente pueda leer semejantes atrocidades, destrozando siglos de avance científico.

2 comentarios :

  1. Durante mis primeros años en Suiza, en los primeros 80, estuve muy en contacto con la llamada Baubiologie (biología de la construcción). Este Ángel Martínez hubiera hecho un gran papel entre aquella gente. Sobre la "energía": sería fantástico que los profesores de lengua y literatura explicaran con todo detalle el concepto de metáfora y sus limitaciones. Muchas gracias por su post.

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  2. Pero si dices que es charlatanería cuando:

    "Lo que siempre pasa cuando alguien que no sabe del tema abre la boca."

    Entonces soporta mi punto de que cuando tú hablas de la homeopatía lo haces desde la charlatanería del seudo escepticismo.

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