¿Tiranosaurios con plumas?

En octubre del 2004 la prestigiosa revista 'Nature' publicaba un curioso estudio en el que un investigador chino llamado Xing Xu afirmaba haber encontrado una especie de tiranosaurio del que sobresalían unas protoplumas en la cola.
Por Javier Peláez.

El dinosaurio en cuestión era un Dilong paradoxus, un pariente del T-Rex perteneciente a la súper familia Tyrannosauridea y con una longitud de unos dos metros de largo. El ejemplar encontrado en Asia, presentaba una cobertura corporal en forma de plumas en las zonas de la mandíbula y la cola.

Aquel especimen de Dilong y el estudio de Xu en 'Nature', renovaron una antigua discusión entre los paleontólogos sobre la posibilidad de que el Tiranosaurio hubiera presentado esos inicios evolutivos de plumas (protoplumas) en algunas partes de su cuerpo.

Para darle un poco de luz al asunto, me pongo en contacto con el Paleofreak, uno de los bloggers más emblemáticos en temas evolutivos, y me explica que los tiranosaurios descienden de otros dinosaurios anteriores, terópodos, mucho más pequeños de tamaño y que posiblemente estuvieran cubiertos por protoplumas por diversas zonas corporales.

Sin embargo, al evolucionar y crecer en tamaño, los tiranosaurios no se vieron en la necesidad de conservar ese plumaje, al igual que en la actualidad los grandes animales como el elefante o el hipopótamo tampoco presentan pelo.

No obstante en la actualidad no existe un acuerdo entre los especialistas al respecto. Nos encontramos con varias teorías sobre las posibles plumas del Tiranosaurio:

1. Los grandes T-Rex perdieron su proto-plumaje en algún momento de la evolución, aunque lo conservaron en determinadas zonas (como la cola).

2. También se considera que al nacer, los jóvenes tiranosaurios salieran del cascarón recubiertos con estas plumas y las fueran perdiendo al hacerse mayores.

3. Por supuesto, existen quienes afirman que los tiranosaurios no tenían plumas y que los ejemplares encontrados en Alberta o Mongolia, indican una piel escamada, ya que una capa de plumas hubiera sobrecalentado un animal de ese tamaño.

Sea como fuere y aunque aún no existe un acuerdo sobre el tema entre los estudiosos, el ilustrador Sammy Hall nos ofrece una visión realmente diferente y espectacular del posible aspecto que podría tener un T-Rex emplumado... Curioso, ¿verdad?